Esposados y en silencio, los empresarios Roberto Monasterolo, Hernán Lobos Rosas, Javier Morales y Cristian Pérez, además del ex secretario de Infraestructura del municipio, Abel Boyero, abandonaron el miércoles la sala de los tribunales penales de barrio Roca, custodiados por la policía, donde poco antes habían llegado en libertad.
Con un revés que tal vez pocos anticipaban, ante el margen que había en la mañana del miércoles para que el tribunal revisor atenuara algunas de las penas, para transformarlas en cumplimiento condicional, el rápido desenlace se produjo a partir del pedido del fiscal Cristian Olazábal, para solicitar la prisión preventiva, lo que finalmente fue concedido por el tribunal de juicio, que los había condenado en agosto último.
Si bien se trata de una medida precautoria, ya que la sentencia aún no está firme y todavía afrontará recursos extraordinarios de los defensores, la imagen de los empresarios y ex funcionario de alto poder municipal fue más que impactante, en la lluviosa tarde del miércoles 4 de diciembre.
De esta manera, la decisión judicial se convirtió en un hecho inédito -al menos en los últimos años- al confirmar una condena contra ex funcionarios y empresarios como no ha sucedido con otras denuncias, y concluir la jornada con los acusados, que habían entrado al recinto en libertad, condenados al menos con prisión preventiva, esposados y con destino a la localidad de Sarmiento por disposición de la Unidad Regional de Policía.
Esas imágenes, con ex funcionarios a quienes se le ratificó condena por la defraudación durante la catástrofe climática de 2017 en Comodoro Rivadavia, fue calificada de impactante e inédita, aunque muchos de los circunstanciales observadores solicitaban seguir buscando responsables políticos que permitieron los sucesos condenados.